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Estrella federal

jueves, 29 de abril de 2010

DOS GRANDES.



EDITH PIAF (el gorrión de París).

Paso por alto toda la tétrica historia de su vida desde el comienzo puesto que hasta para nacer fue signada por el infortunio; nació en plena calle porque su madre no llegó a tiempo al hospital y el alumbramiento, como un mal augurio, ocurrió en una calle parisiense , a la luz de un farol, el 19 de Diciembre de 1915.

Toda su vida fue una cadena de vicisitudes y no entraré en detalles porque lo que importa es destacar el hecho de que
fue sorteando dificultades, escalando poco a poco la cuesta pronunciada de paradójicas situaciones, tanto aciagas como brillantes, hasta alcanzar el lugar que su voz y su talento merecían .
Triunfó y cosechó aplausos de multitudinarios espectadores que, obviando los rumores de sus numerosos amoríos y su inclinación a todo tipo de excesos y adicciones, la consideraban la pequeña, prodigiosa e insuperable “GORRIÓN DE PARÍS”, pero deberían haberla llamado “ EL RUISEÑOR DE PARÍS ”y me quedo corta .

Su voz maravillosa, su inquietante personalidad, y su indiscutible talento, perdurarán por siempre en quienes la conocieron y la admiraron.
Murió el 11 de septiembre de1964 y a su entierro asistieron 40.000 ( llorosas personas ).

CHARLES AZNAVOUR

Nace el 22 mayo de 1924 en París, de padres armenios. Su verdadero nombre es Varenagh Aznavourian.Actuó desde los 11 años, cantando con una hermana suya y en espectáculos infantiles.
En 1941 comenzó escribiendo canciones que interpretaba a dúo con Pierre Raché y actuaban en la primera parte del
concierto de Edith Piaf.

Sus comienzos ( como el de tantos) fueron muy duros y hasta rechazado a veces por su pequeña talla y otros defectos que su personalidad supo explotar, convirtiéndolos en cualidades.
Conquistó a los estadounidenses y su música recorrió el mundo entero y llegó a ser el nº 1 de los cantantes franceses.
Al mismo tiempo actuó también en cine, revelándose como un actor de talento en las pocas películas que intervino.

Debido a un grave accidente de coche tuvo que dejar de actuar, y Aznavour es nombrado embajador permanente de Armenia por la UNESCO.
Tenía programadas giras que por motivos de salud tuvo que frenar y en 1999 anuncia su retiro para octubre del año 2000, con sus últimos conciertos parisinos. Tuvo 80 Oros y un total de 400.000 discos vendidos.

Con esta breve biografía que adolece de tremenda falta de informes, porque en síntesis lo que traté es de homenajear a estos dos” monstruos” de la canción que dejaron una huella imborrable.
Os dejo un testimonio en este video, de la maravilla que es poder escucharlos y verlos juntos con el arte incomparable de sus gorjeos, en musicalidad fuera de lo común. Éxtasis de los oídos en un impagable instante de ensoñación en que el tiempo se detiene, suspendido en las alas de lo insuperable, mágico, desbordando en torrentes de encontrados sentimientos. ¿ Nostalgia? ¿encantamiento¿ ¿placer de los sentidos con la enorme dicha de ver juntos a
estos dos GENIOS?

Juliana Gómez Cordero

Edith Piaf & Charles Aznavour - Plus bleu que tes yeux









domingo, 25 de abril de 2010

LAS HORAS QUE SE VAN....



Hay un tic- tac. inaudible de un reloj invisible al que oyes marcar tus horas y no prestas atención, hasta que pasaron tantas, que te cuesta creer en la metamorfosis de las cosas que te rodean, advirtiendo lo acaecido en ese ritmo sin pausas , sin apuros y sin tú haberlo notado ¿cuán desprevenido estabas?.
Acaso creías que por no tenerlas en cuenta, ¿se iban a detener? ¿Qué todo lo que te rodeaba iba a permanecer estático, por siempre sin ninguna alteración?
Todo; el paisaje, las luces y sombras, tú mismo y tus semejantes, son mutables. Sigiloso y tenazmente monitoreado por ese incesante devenir del tiempo, suceden los cambios y la vida avanza y avanza ¿o no te diste cuenta? ¿No advertiste que todo tiene su tiempo y ese tiempo cuenta y vale según el uso que le demos? O lo tenemos en cuenta cumpliendo metas , sueños y proyectos o lo dejamos pasar con indiferencia en una perdida que nunca…. nunca, podremos recuperar.
Porque sería reiterativo lo de “el tiempo perdido no se recupera rjamás” y puesto que lo sabemos, lo lógico sería no descuidarlo y tratar de no dejar vacíos en él.
¿Como lograrlo? prestando más atención al tic-tac de ese reloj que no debemos eludir porque nos conduce por la senda del SINO ya designado para cada uno de nosotros.
¡¡ APROVECHÉMOSLO !!

Juliana Gómez Cordero,